Real Fábrica

L’1 de maig de 1727 entra en funcionament la Reial Fàbrica de Pisa i Porcellana, fundada a l’Alcora per En Buenaventura Abarca de Bolea y Ximénez de Urrea, IX Comte d’Aranda.

Esta singular instalación fabril, original y pionera en muchos aspectos, basó su éxito y pervivencia en numerosos aspectos nuevos que irrumpen en el panorama pre-industrial español: la contratación de prestigiosos técnicos y artistas extranjeros, la redacción de unas detalladas ordenanzas que regulaban todos los aspectos del funcionamiento de la Fábrica, la creación de una Escuela de Aprendices, el establecimiento de fluidos canales de comercialización del producto, etc ...

No és casualitat que el comte d’Aranda fixés la seu de la seua empresa a l’Alcora, capital del senyoriu de l’Alcalatén, del qual era titular. Tenia la nostra ciutat una arrelada tradició terrissera i, en el moment de la fundació de la Reial Fàbrica, hi havia una vintena de forns dedicats a la producció de cànters, olles i d’altres atuells d’ús corrent, a més de jaciments d’argila de bona qualitat.

El Museo de Cerámica de Alcora, desde su fundación en 1994, se ha marcado como objetivo prioritario reunir una colección significativa y lo más completa posible a nivel cronológico, tipológico y estilístico, tanto a través de adquisiciones como mediante la firma de convenios con otros museos y colecciones privadas. Esta segunda vía ha sido fundamental para poder completar la colección propia con vistas al nuevo montaje expositivo tras la ampliación del Museo (2012), y así se han podido incorporar obras procedentes del Museo Nacional de Cerámica de Valencia, Museo de cerámica de Barcelona, ​​Museo de Bellas Artes de Castellón, Parroquia de Alcora, colecciones Torrecid y Ceracasa de Alcora, colecciones particulares y fondos cedidos por la Asociación de Amigos del Museo de cerámica (AMCA).